Los
contactan, se ganan su confianza y cuando logran imágenes comprometedoras,
delinquen. La falta de supervisión de padres a hijos los convierte en presa
fácil de pedófilos que usan sus fotos para negociar.
Esa tarde, como
muchos adolescentes, Daniel* de 15 años entró en contacto con una niña de su
edad a través de Facebook. No pensó en que solo un mes después sería una de las
víctimas del 'sexting', una práctica que consiste en tomarse fotos con poses
insinuantes y, en los casos más extremos, sexuales, para luego subirlas o
enviarlas a través de las redes sociales. El problema es que los pedófilos y
los delincuentes ya saben cómo delinquir con este material y hasta extorsionar.
¿Cómo lo hacen?, se agregan a las redes con perfiles falsos y así comienzan a
engañar.
“Ella me mandaba
fotos en ropa interior. Era una niña muy bonita pero cuando le preguntaba cómo
podíamos vernos siempre me respondía con evasivas”, contó la víctima, quien
accedió también a enviarle fotos desnudo. Pero la historia tomó un giro
inesperado cuando el joven, estudiante de un colegio distrital de Bogotá,
recibió una llamada. “Era la voz de un hombre que me pedía
200.000 o que tuviera sexo con él. Me dijo que si no accedía le
iba a mandar mis fotos íntimas a todos mis contactos, a mis amigos y a mis
familiares”.
El estudiante nunca pensó en acceder a sus peticiones, pero al
poco tiempo supo que las amenazas eran ciertas. “Un día llegué
al colegio y ya varios de mis compañeros tenían las fotos. Me comenzaron a
tratar de homosexual y a mirarme con asco. No sabía qué hacer, me daba mucha
vergüenza contarle a mi familia o a algún amigo”.
Y ahí está el
otro problema. Según Ricardo Ruidiaz, director de Stop Bullyig Colombia,
fundación que trabaja en contra del matoneo y el abuso infantil en el país, la falta de conocimiento y
confianza con padres de familia y docentes no permite que los jóvenes se
informen y denuncien con tranquilidad. “Eso fue lo que nos motivó a realizar
una encuesta por redes sociales a universitarios y estudiantes”. En total se
entrevistó a 5.000 alumnos de colegio y 4.200 universitarios en 2014 y 2015.
De ellos, el 69 % (3.450) y el 78 % (3.276) aceptó alguna vez
haber experimentado 'sexting'. “El problema no
es solo la práctica en sí, que pone en riesgo a menores de edad y adultos, sino
que los usuarios se convierten en presa fácil de delincuentes y hasta de sus
compañeros de estudio, quienes usan las imágenes como una forma de burla y
ofensa”. Quienes suben 'sexting' a sus redes sociales tienen el 96 % de
probabilidades de estar propensos a 'ciberbullying' por sus compañeros de
estudio.
Daniel nunca
denunció, el miedo al escarnio público se lo impedía, pero por lo menos logró
la asesoría de la fundación. “Lo alarmante del fenómeno es que entre colegios
el objetivo es tener el mayor número de fotografías 'sexting', pero el juego va
más allá, porque las redes de pornografía infantil están utilizando este
material y lo publican en otros países del mundo”.
De hecho, las
autoridades y la fundación investigan una página de Facebook, originada en un
país de Centroamérica en la que casi el 40 por ciento de los participantes son
de origen colombiano y muchos son menores de edad. “Lo que hacen es intercambiar
material pornográfico que obtienen en las redes sociales, con y sin permiso,
con países de Latinoamérica y con Estados Unidos”, dijo
Ruidiaz. El experto explicó que algunos usuarios de esta clase de páginas son
productores de pornografía infantil y otros son pedófilos que practican el
llamado 'grooming': asumen identidad falsa de niños y adolescentes para captar la
atención de las víctimas, abusar de ellas y obtener material pornográfico para
comercializarlo o para su consumo personal.
En el estudio,
Bogotá figura como la ciudad en dónde más jóvenes aseguran realizar estas
prácticas, pero en general en ciudades como Barranquilla, Cartagena,
Bucaramanga, Cúcuta o Medellín, el 'sexting' es considerado como un asunto de
moda. “En mi colegio es normal que las niñas se tomen fotos con caras sensuales
y que luego las suban a Face. Eso sí criticamos cuando ya se pasan con escotes
o cosas así”, dijo una estudiantes de un colegio en el norte de Bogotá. Lo más
grave de todo esto es que imágenes sutiles pueden, incluso, ser manipuladas y
utilizadas para comercializarlas, dijo Ruidiaz.
Según Carolina
Piñeros, directora de RedPapaz, una imagen o un video de 'sexting' con menores
de edad puede constituirse en un delito y los infractores ser judicializados
por producir o distribuir las imágenes. “Eso es pornografía infantil y debe ser
castigado”. Siguen siendo pocos los padres que supervisan qué es lo que hacen
sus hijos en las redes sociales. “No los vigilan, no les explican, ni conocen
los riesgos a los que se exponen”, dijo Carolina Piñeros. directora de
RedPapaz.
Según explicó,
su red de ayuda Te Protejo ha recibido 1.795 denuncias, de las cuales el 48 por ciento (861
casos) corresponden al delito de pornografía infantil. “Muchos
de ellos comienzan con un caso de 'sexting'. Es como una bola de nieve. Los
jóvenes no dimensionan lo que puede llegar a pasar con estas fotos y videos y
los padres pecamos por ingenuos pensando que nuestros hijos nunca harían algo
así”, agregó Piñeros.
Según cifras de
Stop Bullying Colombia, 3 de cada 5 adolescentes de 13 a 17 años tienen un
celular propio. “La mayoría se toma selfis que distribuyen a otras personas con
poses insinuantes que terminan en la internet”, dijo Ruidiaz y agregó que la
cifra aumenta en la franja de 17 a 24 años (universitarios). “El 81 por ciento
tiene celular y el 78 dice haberse tomado fotos provocativas con él”.
El único avance
en el área educativa es el que sacó adelante la Secretaría de Educación (SED)
con la estrategia RIO, contra el hostigamiento y la violencia escolar. “A
través de esta plataforma el cuerpo docente y los estudiantes denuncian
cualquier anomalía, que ponga en riesgo el clima escolar”, dijo Ariel Ávila,
investigador de la entidad.
Gracias a esta
plataforma en el 2014 se detectaron más de 1.000 casos de amenazas al clima
escolar.
Carol Malaver – Redactora de EL TIEMPO
Preguntas a desarrollar:
1.
Escriba 5 de las razones por las cuales los jóvenes que llegan a presentar este
tipo de situaciones no las comentan con sus padres.
2.
Si tuviera la oportunidad. Qué consejo le daría a sus amig@s/compañer@s y a los
padres de familia para que se dialoguen abiertamente, sin secretos, ni temor
con respecto a esta situación.
Amig@s/Compañer@s:
Padres
3.
Qué opinan sus padres y/o acudiente sobre la lectura?
Firma
del Padre/Acudiente _____________________ Parentesco
_____________
Profe la lectura 2
ResponderEliminarProfe la lectura 2
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